VIDAS LIMPIAS, PURAS
Perfeccionando la santidad en el temor de Dios.
Por tanto, amados, teniendo estas promesas, limpiémonos de toda inmundicia de la carne y del espíritu.
He aquí, tú deseas la verdad en lo más íntimo, y en lo secreto me harás conocer sabiduría.
…enseñándonos, que negando la impiedad y los deseos mundanos, vivamos en este mundo sobria, justa y piadosamente.
Así brille vuestra luz delante de los hombres, para que vean vuestras buenas acciones y glorifiquen a vuestro Padre que está en los cielos.
No que ya lo haya alcanzado o que ya haya llegado a ser perfecto, sino que sigo adelante, a fin de poder alcanzar aquello para lo cual también fui alcanzado por Cristo Jesús.
Y todo el que tiene esta esperanza puesta en Él, se purifica, así como Él es puro.
Y el que nos preparó para esto mismo es Dios, quien nos dio el Espíritu como garantía.
…a fin de capacitar a los santos para la obra del ministerio, para la edificación del cuerpo de Cristo; hasta que todos lleguemos a la unidad de la fe y del conocimiento pleno del Hijo de Dios, a la condición de un hombre maduro, a la medida de la estatura de la plenitud de Cristo.
II Co. 7:1, Sal. 51:6 Tit. 2:12 Mt. 5:16 Fil.3:12 I Jn. 3:3 II Co. 5:5 Ef. 4:12,13
Verdaderamente es el privilegio mas grande que uno puede alcanzar estar a la estatura de nuestro”SEÑOR”, porque a quien iremos sino es a el solo a el alcanceremos todo lo mejor y tendremos un espiritu sano y limpio.
Por eso debemos buscar todo lo bueno que el “SEÑOR” quiere darnos.