PON TU MIRA EN LAS COSAS DE ARRIBA

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 Cisternas agrietadas que no retienen el agua.

Eva…dio a luz a Caín, y dijo: He adquirido varón con la ayuda del Señor.

Vamos, edifiquémonos una ciudad y una torre cuya cúspide llegue hasta los cielos, y hagámonos un nombre famoso, para que no seamos dispersados sobre la faz de toda la tierra.

Así los dispersó el Señor desde allí sobre la faz de toda la tierra, y dejaron de edificar la ciudad.

Y escogió Lot para sí todo el valle del Jordán. Y alzó Lot los ojos y vio todo el valle del Jordán, el cual estaba bien regado por todas partes, como el huerto del Señor. Y los hombres de Sodoma eran malos y pecadores contra el Señor en gran manera.

Y apliqué mi corazón a conocer la sabiduría y a conocer la locura y la insensatez; me di cuenta de que esto también es correr tras el viento.

Porque en la mucha sabiduría hay mucha angustia, y quien aumenta el conocimiento, aumenta el dolor. Engrandecí mis obras, me edifiqué casas, planté viñas para mí; Reuní también para mí plata y oro y el tesoro de los reyes y de las provincias. Me proveí de cantores y cantoras, y de los placeres de los hombres, de muchas concubinas.

Consideré luego todas las obras que mis manos habían hecho y el trabajo en que me había empeñado, y he aquí, todo era vanidad y correr tras el viento, y sin provecho bajo el sol

Y en el último día, el gran día de la fiesta, Jesús puesto en pie, exclamó en alta voz, diciendo: Si alguno tiene sed, que venga a mí y beba.

Porque Él ha saciado al alma sedienta,  y ha llenado de bienes al alma hambrienta.

Poned la mira en las cosas de arriba, no en las de la tierra.

Jer. 2:13   Gn. 4:1; 11:4,8;  13:11,10,13   Ec. 1:17,18;  2:4,8,11   Jn. 7:37   Sal. 107:9   Col. 3:2

        

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