SACRIFICIOS COMPARTIDOS
Sacrificios corrompidos
«¡Saquen esto de aquí! ¿Cómo se atreven a convertir la casa de mi Padre en un mercado?» (Juan 2: 16).
LA CENTRALIZACIÓN DEL CULTO A DIOS en el santuario, y posteriormente en el templo, tenía la finalidad de evitar que los israelitas cayeran en la idolatría rampante que había en Canaán en tiempos de la conquista. La religión cananea estaba basada en los sentidos, y esto tendía a corromper a las personas, promoviendo la prostitución, el vicio y la licencia. Estaba saturada de brujería y espiritismo, que la hacía sumamente atractiva para la mentalidad de aquellos días. Pero llegó a ser una trampa para los israelitas.
La única manera de permanecer alejados de esa religión era adorando en un lugar concreto. Además había que destruir los lugares de culto pagano. Los israelitas al principio fueron reacios a destruir dichos lugares de adoración. Finalmente también se abandonó la centralidad del culto. En tiempos de Jeroboam se erigieron centros de adoración rivales en el reino del norte. Esto corrompió la religión en Israel, y afectó al reino de Judá. Dios tuvo que poner fin a ese sistema corrupto de culto que no había instituido.
En la época de Cristo la religión judía tocó fondo nuevamente. Se llegó a pensar que los sacrificios eran un fin en sí mismos, y que por medio de ellos se obtenía mérito delante de Dios. La religión judía se convirtió en culto a las obras, una religión legalista y paganizada. No se discernían los elementos espirituales relacionados con el ceremonial. «Habían sido impuestas numerosas ceremonias al pueblo, sin la debida instrucción acerca de su significado. Los adoradores ofrecían sus sacrificios sin comprender que prefiguraban al único sacrificio perfecto. […] El culto espiritual estaba desapareciendo rápidamente. Ningún vínculo unía a los sacerdotes y gobernantes con su Dios. La obra de Cristo consistía en establecer un culto completamente diferente» (El Deseado de todas las gentes, p. 130). Todo el sistema debía ser desechado, pues no había poder espiritual en esa religión.
El modelo a seguir
Procura que todo esto sea una réplica exacta de lo que se te mostró en el monte (Éxodo 25: 40).
POR MEDIO DE LOS HOLOCAUSTOS de la era patriarcal y del sistema ritual del santuario, Dios se proponía educar a su pueblo en el plan de salvación. Los servicios del santuario eran más instructivos que los sencillos holocaustos de los patriarcas.
Dios fue el creador de todo el sistema ceremonial. No solo ordenó que se edificara un tabernáculo como símbolo de su presencia, sino que el ritual elaborado era un medio educativo para transmitir las verdades esenciales del plan que Dios había ideado para redimir al ser humano. Expresamente dijo a Moisés: «Después me harán un santuario, para que yo habite entre ustedes. El santuario y todo su mobiliario deberán ser una réplica exacta del modelo que yo te mostraré» (Éxo. 25: 8, 9). Como Dios tenía el propósito de que los servicios del santuario fuesen un medio didáctico para transmitir las ideas relacionadas con la salvación del género humano, era necesario seguir el plan cuidadosamente. Por eso, Dios mostró a Moisés los planos exactos para construir el santuario, y le dio instrucción cuidadosa de cómo se realizarían las ceremonias y el ritual.
Se nos dice: «Sin embargo, las verdades importantes acerca del santuario celestial y de la gran obra que allí se efectúa en favor de la redención del hombre debían enseñarse mediante el santuario terrenal y sus servicios» (Cristo en su santuario, p. 43). «El santuario terrenal y sus servicios revelaban importantes verdades relativas al santuario celestial y a la gran obra que allí se llevaba a cabo para la redención del hombre» (ibíd., p.102). La mente perceptiva del autor de la Epístola a los Hebreos creía que las ceremonias del santuario mosaico eran «copias de las realidades celestiales» (Heb. 9: 23). Los servicios del santuario, entonces, tenían la intención expresa de enseñar esas verdades.
Que Dios te bendiga,
Pedidos de oración a cielo77014@hotmail.com
Agosto, 26 2010