ESPERANDO AL SEÑOR
Despierta, tú que duermes,
y levántate de entre los muertos,
y te alumbrará Cristo.
Ya es hora de despertaros del sueño; porque ahora la salvación está más cerca de nosotros que cuando creímos.
Por tanto, no durmamos como los demás, sino estemos alerta y seamos sobrios. Porque los que duermen, de noche duermen, y los que se emborrachan, de noche se emborrachan. Pero puesto que nosotros somos del día, seamos sobrios, habiéndonos puesto la coraza de la fe y del amor, y por yelmo la esperanza de la salvación
Levántate, resplandece, porque ha llegado tu luz y la gloria del Señor ha amanecido sobre ti. Porque he aquí, tinieblas cubrirán la tierra y densa oscuridad los pueblos; pero sobre ti amanecerá el Señor, y sobre ti aparecerá su gloria.
Por tanto, ceñid vuestro entendimiento para la acción; sed sobrios en espíritu , poned vuestra esperanza completamente en la gracia que se os traerá en la revelación de Jesucristo.
Estad siempre preparados y mantened las lámparas encendidas, y sed semejantes a hombres que esperan a su señor.
Ef. 5:14 Ro.13:11 I Ts.5:6-8 Is.60:1,2 I P. 1:13 Lc. 12:35,36