EL CIELO

Allí no habrá noche.

Tendrás al Señor por luz eterna, y a tu Dios por tu gloria.

La ciudad no tiene necesidad de sol ni de luna que la iluminen, porque la gloria de Dios la ilumina, y el Cordero es su lumbrera.

Y ya no habrá más noche, y no tendrán necesidad de luz de lámpara ni de luz del sol, porque el Señor Dios los iluminará, y reinarán por los siglos de los siglos.

Pero vosotros sois linaje escogido, real sacerdocio, nación santa, pueblo adquirido para posesión de Dios , a fin de que anunciéis las virtudes de aquel que os llamó de las tinieblas a su luz admirable.

dando gracias al Padre que nos ha capacitado para compartir la herencia de los santos en luz.

El nos libró del dominio de las tinieblas y nos trasladó al reino de su Hijo amado, porque antes erais tinieblas, pero ahora sois luz en el Señor; andad como hijos de luz

Todos vosotros sois hijos de luz e hijos del día. No somos de la noche ni de las tinieblas.

Mas la senda de los justos es como la luz de la aurora, que va aumentando en resplandor hasta que es pleno día.

 

Ap. 21:25   Is. 60:19   Ap. 21:24;  22:5   I P. 2:9   Col.1:12,13   Ef. 5:8      I Ts. 5:5   Pr. 4:18


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