El Señor es mi porción.

Todo es vuestros…y vosotros de Cristo, y Cristo de Dios.

Nuestro gran Dios y Salvador Cristo Jesús… se dio a sí mismo por nosotros.

Dios… todo sometió bajo sus pies, y a El lo dio por cabeza sobre todas las cosas a la iglesia,

Cristo amó a la iglesia y se dio a sí mismo por ella, a fin de presentársela a sí mismo, una iglesia en toda su gloria, sin que tenga mancha ni arruga ni cosa semejante, sino que fuera santa e inmaculada.

En el Señor se gloriará mi alma; lo oirán los humildes y se regocijarán.

En gran manera me gozaré en el Señor,  mi alma se regocijará en mi Dios; porque El me ha vestido de ropas de salvación, me ha envuelto en manto de justicia como el novio se engalana con una corona, como la novia se adorna con sus joyas.

¿A quién tengo yo en los cielos, sino a ti? Y fuera de ti, nada deseo en la tierra. Mi carne y mi corazón pueden desfallecer,pero Dios es la fortaleza de mi corazón y mi porción para siempre.

 Yo dije al Señor: Tú eres mi Señor;  ningún bien tengo fuera de ti.

El Señor es la porción de mi herencia y de mi copa; tú sustentas mi suerte.

Las cuerdas cayeron para mí en lugares agradables; en verdad mi herencia es hermosa para mí.

Sal.119:57   I Co.3:21,23   Tit. 2:13,14   Ef.1:22;  5:25,27   Sal.34:2   Is. 61:10   Sal.73:25,26;  16:2,5,6