Bendición, Provisión y Protección
¿Alguna vez escuchaste decir a alguien la expresión “casa, carro y beca”?. Es una expresión muy común en el mundo para dar a entender que una persona tiene “todo lo que necesita”, aparentemente. También hay otra que dice: “hay gente tan pobre que lo único que tiene es plata”. En ambas expresiones hay algo que me llama la atención y es que solo se tiene la provisión. Pero a mi juicio, faltarían dos elementos que son solo producto de tu relación y caminar con Dios, los cuales son añadidos como consecuencia de tu obediencia, estos son: bendición y protección.
Dice la Palabra de Dios en Mateo 16:26 – TLA, “de nada sirve que una persona gane en este mundo todo lo que quiera, si al fin de cuentas pierde su vida”. No hay nada más triste que el afán de acumular riquezas en este mundo si no tuviéramos a Cristo en nuestro corazón. Viviríamos una vida sin propósito, pensando que el dinero lo es todo, ¿no es así?.
Mira lo que la Biblia nos enseña hoy:
“¿No le has cercado alrededor a él y a su casa y a todo lo que tiene? Al trabajo de sus manos has dado bendición; por tanto, sus bienes han aumentado sobre la tierra” (Job 1:10 – RVR1960).
Cuando se está con Dios, vienen como resultado estas tres cosas:
Número uno, bendición.
La bendición siempre será una consecuencia de la obediencia a Dios, y de escuchar Su voz y hacer lo que nos pida (Deuteronomio 28:1 – RVR1960). Ser bendecido por Dios es como lo expresa Job 1:10, el trabajo de tus manos Dios bendecirá, es una prenda de garantía, y créeme así será porque Dios es fiel y no es hombre para mentir. Quiere decir que sí hay un deseo de parte de Jehová Dios de bendecirte, de añadir a tu vida para que nada te falte, para que puedas vivir una vida en abundancia junto a tu familia. Fíjate que la Palabra dice que el el cerco de Job estaba sobre él y sobre su casa y todo lo que tenía.
Número dos, provisión.
Otra consecuencia directa de estar caminando con el Señor en obediencia es la provisión. Cuando el pueblo de Israel estuvo en el desierto, su gran preocupación fue la provisión, ¿qué comerían? ¿qué darían a sus hijos?. Y dice la Palabra en Éxodo 16:15 – RVR1960, “así comieron los hijos de Israel maná cuarenta años”. Cuando Dios está contigo, tu preocupación número uno no debería ser la provisión, sino la comunión. A medida que aumenta tu comunión, más conocimiento tendrá el Señor de tus necesidades (Mateo 6:32-33 – RVR1960). Así que si estás atravesando por el desierto en este momento, tienes la excusa perfecta para aumentar tu comunión con Dios, porque de lo demás Él se encargará, no olvides lo que nos enseña la Palabra: al que cree todo lo es posible (Marcos 9:23 – RVR1960). Solo cree y verás cómo sobrenaturalmente Dios abrirá puertas de bendición, de provisión y de protección a tu vida.
Número tres, protección.
Finalmente, otra consecuencia del caminar con Dios es la protección, quizá para mí la más importante. Aunque todas son productos de la obediencia, la protección es el vallado que Dios forma a tu alrededor para guardarte del maligno en todo momento. La Biblia nos enseña en Salmos 91:11 – RVR1960, “pues a sus ángeles mandará acerca de ti, que te guarden en todos tus caminos”. ¿De qué me sirve, pues, tener todo el dinero del mundo si me faltaran la bendición y la protección de Jehová mi Dios? ¿Qué provecho tendría amasar riquezas si en mi vida no tengo a Cristo?. Solo Dios es el único que puede lograr darle un propósito a tu vida, y cuando caminamos en pos de cumplirlo, la obediencia añadirá a nuestras vidas todo lo que necesites, y las bendiciones tendrán que perseguirte a donde fueres, ¿lo crees?.
Dios te bendiga y te guarde siempre, que el trabajo de tu mano sea bendecido y que Su protección nunca te falte. No olvides compartir este mensaje con otras personas, sé de bendición tú también para otras personas.