«Estoy con dos mujeres a la vez»
En este mensaje tratamos el caso de un hombre que «descargó su conciencia» de manera anónima en nuestro sitio www.conciencia.net y nos autorizó a que lo citáramos, como sigue:
«Estoy comprometido con una chica desde hace seis años…. Hace dos años conocí a otra chica… y no sé desde cuándo comencé a sentir algo por ella. Mi error fue no cortar desde un inicio.
»Terminé mi compromiso anterior. Ya teníamos planes de casarnos. La dejé plantada a unos meses de casarnos, y me dolió mucho dejarla. Me sentí miserable por haberle roto el corazón a una buena mujer. Ella me buscaba, y yo no tenía el valor para contarle la verdad acerca de mi nuevo compromiso…. Al vernos frente a frente, no contuvimos la emoción y volvimos a estar juntos.
»Ahora no sé qué hacer. Estoy con dos mujeres a la vez. Me siento el ser más despreciable y egoísta por engañar, mentir y no permitir que sean felices sin mí.
»Intenté cortar la relación con las dos, pero aparentemente para ellas no hay excusas que valgan. Si les dijera la verdad, se acabaría mi mundo porque estaría dejando una parte de mi corazón en cada una de ellas.»
Este es el consejo que le dio mi esposa:
«Estimado amigo:
»Tiene razón al reconocer que debió haber cortado la relación con su segunda novia antes de que se convirtiera en un noviazgo. Pero se sintió atraído por esa mujer y dejó que sus emociones predominaran sobre la lógica.
»En determinado momento usted decidió que prefería a la segunda novia, ya que cortó con la primera. Pero luego dice usted que no pudo contener la emoción cuando volvió a encontrarse con la primera, así que una vez más hizo lo que lógicamente sabía que no debía hacer. Con eso suman dos ocasiones en favor de permitir que predominen sus emociones, y cero en favor de tomar decisiones lógicas.
»Usted dice que se siente despreciable y egoísta por engañar a las dos. Al parecer, no teme el ser despreciable tanto como teme el terminar con el corazón quebrantado.
»Ya sabe que si amara a cualquiera de las dos lo suficiente como para casarse con ella, no le sería tan difícil decidirse por una. Así que debe decirles a las dos la verdad de inmediato. Es cierto que lo odiarán, y es cierto que le quebrantará el corazón. Pero al menos estará siendo sincero y por fin estará tomando una decisión lógica en lugar de una decisión basada en las emociones.
»Aunque usted se considere despreciable, y aunque ambas mujeres pronto lo considerarán así también, Dios lo ama a tal grado que sacrificó a su único Hijo Jesucristo para pagar el castigo por los pecados que usted ha cometido. Y aunque sufra las consecuencias ahora, si le pide a Dios que lo perdone en el nombre de Cristo, no tendrá que pagar el castigo eterno por esos pecados. Le instamos a que comience a cultivar una relación con Dios hoy mismo. Él lo ayudará a tomar mejores decisiones en el futuro.»
Con eso termina lo que recomienda Linda, mi esposa. Este caso y este consejo pueden leerse e imprimirse si se pulsa la pestaña en www.conciencia.net que dice: «Casos», y luego se busca el Caso 534.
Carlos Rey
Un Mensaje a la Conciencia
www.conciencia.net