«Para cada cosa, mi esposo llama a la mamá»
Imagen por ralf.st
En este mensaje tratamos el siguiente caso de una mujer que «descargó su conciencia» de manera anónima en nuestro sitio www.conciencia.net, autorizándonos a que la citáramos:
«Hace seis meses me casé con un hombre que me ama y me respeta…. Nos llevamos bien, pero he notado que, para cada cosa que él va a hacer, llama a la mamá y se lo hace saber…. Le dice absolutamente todo, desde lo que se cocina en casa hasta la hora en que se levanta. Y si él no le contesta los mensajes, ella se molesta con él….
»Nosotros la visitamos los domingos, pero casi siempre quiero volver a casa…. La Biblia dice que dejará el hombre o la mujer su casa o familia para hacer la suya propia. No sé cómo hablar con él. No quiero que piense que tengo algo en contra de mi suegra.»
Este es el consejo que le dio mi esposa:
«Estimada amiga:
»¡La felicitamos por su matrimonio reciente! Nos encanta el hecho de que su esposo la ame y la respete. ¡Esa es una gran bendición!
»Tiene usted razón de que la Biblia dice que el hombre debe dejar a su padre y a su madre para unirse a su esposa.1 Concordamos en que es muy importante, y por eso les aconsejamos a las parejas que no se casen sino hasta que tengan la solvencia económica para separarse de sus padres y vivir por su propia cuenta. Pero no comprendemos por qué se refiere usted a eso. Su esposo sí se separó de sus padres, y ahora vive con usted.
»Hay quienes creen que el esposo que trata bien a la mamá es un hombre que así mismo tratará bien a la esposa. Ese trato considerado demuestra que él tiene las virtudes de la compasión, la bondad, el respeto y la lealtad.
»De cualquier manera, sólo podemos darle un consejo basado en lo que usted nos cuenta. Usted dice que su esposo llama a la mamá, responde a los mensajes de ella, y le cuenta “absolutamente todo” a ella. Pero usted no menciona que la mamá le dice lo que él tiene que hacer, ni que él considera más importante la opinión de ella que la de usted. Y usted tampoco dice que él visita a su mamá todos los días, dejándola a usted en casa sola, ni que él es negligente con usted para atender más bien a la mamá.
»Recuerde que la Biblia también nos manda que honremos a nuestro padre y a nuestra madre,2 y al parecer, eso es lo que su esposo está haciendo. Creemos que sería sabio de su parte que cambiara su manera de ver este asunto. En vez de estar un poco celosa de que su esposo tenga una relación estrecha con la mamá, esté agradecida de que él es un hombre de esos que muestran un interés profundo por sus seres queridos.
»Usted en definitiva no es la primera esposa a quien le resulta difícil llevarse bien con la suegra. Sin embargo, creemos que le resultará más fácil si se esfuerza por no considerarla como su rival, ni como alguien que quiere quitarle algo que le pertenece a usted. Esfuércese más bien por verla como la ve su esposo. Ámela porque él la ama a ella.»
Con eso termina lo que recomienda Linda, mi esposa. Este caso y este consejo pueden leerse e imprimirse si se pulsa la pestaña en www.conciencia.net que dice: «Casos», y luego se busca el Caso 708.
Carlos Rey
Un Mensaje a la Conciencia
www.conciencia.net
1 | Gn 2:24 |
2 | Éx 20:12 |