Fuisteis como tizón arrebatado de la hoguera.

Aterrados están los pecadores en Sion, el temblor se ha apoderado de los impíos.¿Quién de nosotros habitará con el fuego consumidor?  ¿Quién de nosotros habitará con las llamas eternas?

De hecho, dentro de nosotros mismos ya teníamos la sentencia de muerte, a fin de que no confiáramos en nosotros mismos, sino en Dios que resucita a los muertos, el cual nos libró de tan gran peligro de muerte y nos librará, y en quien hemos puesto nuestra esperanza de que El aún nos ha de librar,

La paga del pecado es muerte, pero la dádiva de Dios es vida eterna en Cristo Jesús Señor nuestro.

¡Horrenda cosa es caer en las manos del Dios vivo!

Por tanto, conociendo el temor del Señor, persuadimos a los hombres.

Predica la palabra; insiste a tiempo y fuera de tiempo; redarguye, reprende, exhorta con mucha paciencia e instrucción.

A otros, salvad, arrebatándolos del fuego.   

No por el poder ni por la fuerza, sino por mi Espíritu, dice el SEÑOR de los ejércitos.

…el cual quiere que todos los hombres sean salvos y vengan al pleno conocimiento de la verdad.

Am. 4:11  Is. 33:14   II Co.1:9,10   Ro. 6:23   He. 10:31   II Co. 5:11   II Ti. 4:2   Judas 23   Zac. 4:6   I Ti. 2:4