La fidelidad del padre
Hudson Taylor, el humilde siervo de Dios que trabajó en China, demostró una extraordinaria confianza en la fidelidad de Dios. En su diario escribió:
«Nuestro Padre celestial tiene mucha experiencia. Sabe muy bien que Sus hijos despiertan con buen apetito cada mañana… mantuvo a tres millones de israelitas en el desierto por cuarenta años. No esperamos que envíe tres millones de misioneros a la China; pero, si lo hiciera, tendría recursos suficientes para mantenerlos a todos… dependamos del hecho de que la obra de Dios hecha a la manera de Dios jamás carecerá de la provisión de Dios».
Puede que estemos débiles y cansados, pero nuestro Padre celestial es todopoderoso. Puede que nuestros sentimientos fluctúen, pero Él es inmutable. Incluso la creación misma es una prueba de Su firmeza. Esa es la razón por la que podemos cantar estas palabras de un himno de Thomas Chisholm: «La noche oscura, el sol y la luna, las estaciones del año también, unen su canto cual fieles criaturas, porque eres bueno, por siempre eres fiel».
¡Cómo nos anima a vivir para Él! Nuestra fuerza para el presente y nuestra esperanza para el futuro no se basan en la estabilidad de nuestra propia perseverancia sino en la fidelidad de Dios. No importa cuál sea nuestra necesidad, podemos contar con la fidelidad del Padre.
Es muy sentido este mensaje DIOS todo lo puede en nuestras vidas. Nuestro norte es el Padre Ceestial y nosotros debemos recordar sus promesas.
BENDICIONES
HABLANDO DE FIDELIDAD, TENGO DUDAS SOBRE SI ESTOY DIEZMANDO CORRECTAMENTE, TENGO UN PEQUENO NEGOCIO Y NO SE SI CALCULA SOBRE EL TOTAL DEL EFECTIVO QUE RECIBO O ES EL 10% DESPUES DE LOS GASTOS QUE GENERA EL MISMO NEGOCIO. LES AGRADECERIA TANTO SI ME QUITARAN ESTA DUDA, POR NADA QUIERO ROBARLE A MI DIOS, DINERO QUE SE NECESITA PARA SU OBRA SANTA.
¿Qué es el Diezmo?
Autor: Lic. Dawlin A. Ureña
(El Lic. Ureña es Pastor, y miembro de la Asociación Científica
CRS – Creation Research Society)
El Diezmo es la puerta del creyente hacia el pacto de bendición. El Diezmo es una ley espiritual tan efectiva como lo son las leyes naturales. Así como la Gravedad permite que los objetos caigan al suelo si son dejados en el vacío, así el Diezmo permite al creyente recibir “medida buena, apretada, sacudida y rebosante”. Lucas 6:38.
El Diezmo es una Ley Espiritual que no tiene limitaciones por el paso del tiempo. Aunque se estableció en el Antiguo Testamento, esta ley hoy continua tan efectiva como siempre.
¿De dónde viene la palabra Diezmo?
La palabra Diezmo nace de la palabra hebrea “maaser” o “maasrah”, que traduce Diezmo, o una décima parte. En el Griego la palabra que designa esta “décima parte” es “apodekatoo” y tanto en el Hebreo como en el Griego, estos términos significan el “pago o dádiva de una décima parte o porción.”
¿Cuál es el propósito del Diezmo?
Cuando damos el Diezmo a Dios de nuestros ingresos, ese acto le permite a Dios actuar en nuestro defecto y bendecirnos. La Biblia contiene numerosos recuentos de hombres dando su Diezmo a Jehová. Dios es el creador de todo lo que hay. Él lo posee todo. Nosotros somos simplemente “administradores” de sus bienes. El propósito del Diezmo es que porque Él desea que nosotros le demos un diez por ciento del 100% que Él nos da, para que nuestro corazón nunca esté concentrado en las lo que Él nos ha dado, sino en el Dador.
Cristo claramente estableció la razón del Diezmo y de nuestras ofrendas a Dios: “Porque donde esté tu tesoro, allí también estará tu corazón”. Mateo 6:21.
La Biblia nos establece el siguiente axioma espiritual: “Toda buena dádiva y todo don perfecto proviene de lo alto y desciende del Padre de las luces, en quien no hay cambio ni sombra de variación… Porque yo Jehová no cambio” Santiago 1:17 y Malaquías 3:8
Si usted ha confiado en el Dios que en Génesis 3:15, hace unos 6,000 años, prometió que un día enviaría un Salvador, y lo hizo, usted debe también confiar en que así como Él, 6,000 años más tarde cumplió su palabra, así hoy cumpla su palabra cuando le promete lo siguiente:
“Traigan íntegro el diezmo para los fondos del templo,
y así habrá alimento en mi casa.
Pruébenme en esto dice el Señor Todopoderoso,
y vean si no abro las compuertas del cielo y
derramo sobre ustedes bendición hasta que sobreabunde.”
Malaquías 3:10
Si usted da el Diezmo que corresponde al Señor, ¡Él no tiene alternativa que bendecirle! De hecho, esta es la única vez en toda la Biblia donde el Señor nos reta a probarlo. ¿Desea aceptar el reto?
¿Pecamos cuando no traemos el Diezmo al Señor?
En el Nuevo Testamento no está claramente establecido que no traer el Diezmo es pecado. Basándonos en la ilustración proporcionada por Jesús en Marcos 12 podemos ver que si usted no da el Diezmo porque en realidad no tiene ningún ingreso, usted no está pecando. Pero… ¿No se moriría de hambre usted si en realidad no tuviera totalmente nada que dar? En el caso de la anciana de Marcos 12, su indigencia era total, pero en medio de la pobreza más terrible, tomó todo lo que tenía y lo dio. ¿Acaso no lo dio con la esperanza de que Dios honraría su palabra y le daría de regreso bendiciones? ¡Esa fue la promesa hecha por el mismo Dios!
Pues en nuestro caso, nosotros que hoy vivimos en tal abundancia, ¿Acaso podríamos alegar que no tenemos nada qué dar? ¡No! Si en su corazón está la actitud de cumplir con la ley de “dar y recibir” establecida en Lucas 6:38 (“Da y se te os dará”), el Señor ciertamente cumplirá con su parte del pacto.
El pecado consistiría en no dar, cuando en efecto tenemos. El pecado consistiría en colocar nuestra confianza y esperanza a la “basura” de este mundo en vez de en la Palabra y Promesas de nuestro Dios.
Las estadísticas muestran que en Estados Unidos solamente un 20% de los cristianos diezman. El otro 80% queda sujeto a la siguiente reprensión:
“¿Acaso roba el hombre a Dios? ¡Ustedes me están robando! Y todavía preguntan: ¿En qué te robamos? ‘En los diezmos y en las ofrendas. Ustedes la nación entera están bajo gran maldición, pues es a mí a quien están robando. Traigan íntegro el diezmo para los fondos del templo, y así habrá alimento en mi casa. Pruébenme en esto dice el Señor Todopoderoso, y vean si no abro las compuertas del cielo y derramo sobre ustedes bendición hasta que sobreabunde.” Malaquías 3:8-10
Dios te bendiga!!!!!
Gracias a DIOS por sus promesas que son para siempre aun nosotros siendo infieles DIOS permanece fiel a sus hijos por medio de nuestro señor y salvador JESUCRISTO
Si confiamos en el veremos sus maravillas cada dia, porque el no se cansa de darnos su amor y bendicion, confia Hermanos que con el lo tenemos todo.
PADRE GRACIAS POR ENSEÑARME EL SIGNIFICADO DE LA SOLIDARIDAD, YA QUE QUIEN NO COMPARTE CON SU HERMANO NO ES DIGNO DE VIVIR, AQUI APLICO LA SIGUIENTE FRASE QUIEN NO VIVE PARA SERVIR NO SIRVE PÀRA VIVIR , PORESO PADRE MUCHAS GRACIAS ENSEÑAME CADA DIA A SER MEJOR PERSONA.